Mock Turtle

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Introduction Al llegar ante la Falsa Tortuga, ésta los miró con grandes ojos llenos de lágrimas, pero sin decir nada. –Aquí esta señorita –dijo el Grifo– quiere conocer tu historia. –Se la contaré –dijo la Falsa Tortuga con voz profunda y lúgubre–. Sentaos y no digáis ni una sola palabra hasta que termine. Así que se sentaron y, durante algunos minutos, nadie habló. «No entiendo cómo puede terminar una historia que nunca empieza», pensó Alicia. Pero aguardó pacientemente.